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Baudet

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 Baudet

El goal-keeper tinerfeño

Ha bastado su solo nombre, para que la afición despertara de su letargo, interesándose nuevamente por su deporte favorito. Tan es así, que pocas veces hemos visto tanto entusiasmo e interés como el demostrado ahora, con ocasión de los partidos que disputaran su equipo, el Tenerife, contra el Marino y Victoria, tanto en Las Palmas como en Tenerife.

Nos explicamos, quienes conocen de viejo la historia futbolística del archipiélago, el por que al solo nombre de Baudet, se despiertan dormidos entusiasmos. Nadie como él ha logrado, que los mismos apasionados de otros equipos contra los que se ha enfrentado ante la emoción de una de sus bellas jugadas, salvando prodigiosamente un tanto que parecía seguro, olvidaran sus simpatías para tributar una ovación, a quien con su arte inimitable conquistaba la admiración unánime de sus adversarios.

Así es Baudet, el más popular de los jugadores canarios. Si en Tenerife cuenta con las simpatías de todos los aficionados de aquella isla, aquí en Las Palmas, forman legión los admiradores sinceros del guardameta tinerfeño, que lo son, no solo las personas sensatas e independientes, sino los mismos apasionados de los clubes locales.

Sin querer hacer historia de sus actuaciones maravillosas, no podemos menos de recordar su labor en la final del Campeonato Lucana, en Santa Cruz frente al Marino, y en su última visita a Las Palmas, en la que fue necesario toda la inteligencia de aquel otro gran artista del balón que se llamaba Miguel Gil, para solo así conseguir perforar una vez la meta por él defendida.

Para quienes han tenido la suerte de presenciar esos memorables encuentros, están de más cuantos elogios hagamos del guardameta Baudet, único entre nosotros y basta su nombre para que sea su mayor elogio.