Lunes, 25 de julio de 1932
Los "blancos" madrileños vencen a los victoristas
1 - 2. También con un lleno impresionante, los graderíos del Campo de Deportes España, se juega el segundo encuentro entre madrileños y victoristas.
Los equipos se alinean de la siguiente forma:
Madrid: Zamora; Ciriaco, Quesada; Leoncito, Valle, Pedro Regueiro; Luis Regueiro, Olivares, Hilario, Lazcano y Eugenio.
Victoria: Suárez; Castellano, Rafael; Paquillo, Simeón, Padrón; Castilla, Tatono, Déniz, Pepín y Corona.
Arbitra el señor Nuez, de Tenerife, quien procede al sorteo de puerta, eligiendo el Victoria la del Poniente.
Después del cambio de ramos de flores que son entregados a la esposa del guardameta Zamora y a la señorita Solita Valle, da comienzo el partido a las cinco en punto.
Transcurridos cinco minutos de juego se retira del campo el guardameta del Victoria, Suárez, el cual se queja de una pierna. Es sustituido por el reserva.
El Victoria, que desde un principio se hizo dueño del campo contrario, salvo algunas arrancadas del Madrid, ataca sin cesar, viéndose por momentos el primer goal.
A los dieciséis minutos de juego Déniz, desmarcándose, recibe un pase de Corona, corre la pelota y al centrar, Ciriaco toca con la mano dentro del área fatal, lo que el referee castiga con la máxima pena. Zamora protesta e impide que se efectúe el castigo. El árbitro, en vista de ello, se retira del campo negándose a continuar arbitrando.
Siete minutos después, vuelve a salir el señor Nuez y ordena se cumpla el castigo. Zamora vuelve a protestar y por fin se cumple lo ordenado por el referee.
Tirado por Paquillo el penalty, Zamora lo desvía a córner.
El Victoria hace magníficas jugadas, tiene en continuo jaque al Madrid, el cual, a pesar de estar haciendo mejores jugadas que ayer, es rara la vez que consigue acercarse a la puerta victorista.
En una de estas jugadas se hace Simeón con la pelota llegando con ella hasta cerca del área de goal, y de un fuerte chut la pasa a la red por el ángulo izquierdo sin que Zamora lo pudiera evitar. Ha sido un magnífico tanto que el público aplaude con caluroso entusiasmo.
Segundo goal. Reacciona el Madrid para buscar el empate.
A los siete minutos de juego Hilario, que está recibiendo más juego que ayer de sus compañeros, recoge un pase del centro, sigue con el esférico y solo ante el portero que le sale al encuentro, le burla y consigue el empate.
Puesta en juego la pelota trabajan ambos equipos por el desempate, finalizando el primer tiempo sin que lo puedan conseguir.
Segundo tiempo. Desde el comienzo de este segundo tiempo, se nota gran decadencia en el equipo local; esto hace que el Madrid se imponga y sea el que domine con juego rápido que es cortado en la mayoría de las veces por la defensa blanquinegra.
Tercer goal. Una melée en la misma puerta del Victoria, hace que los forasteros se apunten el segundo goal. Este fue recibido fríamente por el público.
Cuando faltaban cinco minutos para terminar el partido, el Madrid comete una falta dentro del área de penalty que el árbitro acusa. Zamora vuelve a protestar enérgicamente.
El árbitro consulta con el juez de línea quien lo da también como falta. Zamora, en vista de ello, inicia la retirada del campo entre las protestas del público, pero vuelva a su puesto.
Se tira la pena por Padrón, y Zamora salva su marco de un fuerte puñetazo. Gran ovación,
Los victoristas trabajan por el empate, pero no lo logró.