Domingo, 28 de julio de 1929
Los "populares" y "catalanes", firman unas tablas
3 - 3. Antes del partido. La segunda actuación del equipo popular frente a los subcampeones catalanes, llevó en la tarde de hoy numeroso público al Campo de Deportes España, el que con tal motivo presentaba un aspecto sorprendente y en especial la gradería general, que aparecía ocupada en su mayor parte.
Constitución de los equipos. Los "onces" contendientes, que fueron recibidos en la cancha con clamorosos aplausos, se alinearon así:
MARINO F. C.: Alfonso; González, Guardia; Martín, Mandarrias, Espino; Victoria, Adolfo, Silva, Toledo y Rodríguez.
C. D. EUROPA: Altés; Soligó, Alcoriza; Gamis, Loyola, Iranzo; Pellicer, Ramonzuelo, Cros, Mauria y Colls
El árbitro y los jueces. Actúa de "referee" don Francisco Ojeda, secundado en su labor por los jueces de línea, señores Cabrera y Frías.
Elección de campo. Por los capitanes de ambos equipos se procede a la elección de campo, eligiendo los forasteros las mallas del poniente.
Comienza el partido. A las seis menos diez minutos saca el balón Silva y en la primera arrancada Adolfo pasa vistosamente a Victorio, centro de este y Toledo remata de cabeza la jugada rebotando el balón en el larguero. A continuación un chut de Toledo rebota en el poste. Se pita un córner contra los europeístas que saca Victorio y va fuera.
Anotamos un pase de cabeza muy bonito de Cros a Pellicer, que Martín detiene a duras penas y el referee corta un avance de los populares por marcadísimo "off-side" de Silva. Se tira un córner contra el Europa, que Rodríguez remata de cabeza yendo el esférico por encima del larguero. Loyola lanza desde lejos a "goal" un tiro rastreado que hace intervenir a Alfonso. Otro córner contra el Europa que saca regularmente Espino y que Soligó despeja con mucha limpieza y serenidad y a un avance del quinteto forastero, que los medios apoyan, Pellicer envía una pelota a "goal" rematando un pase matemático de Cros, el que desde los comienzos está desarrollando una labor inteligentísima de la que tiene pendiente a todos A renglón seguido Iranzo, mete la cabeza a otro pase de Cros. Ambos remates murieron en las manos del portero.
Un fallo de Mandarrias crea una grave situación frente a su marco, que salva la defensa marinista haciendo prodigios, y Loyola, alma de esta primera etapa del encuentro lanza balones y más balones, de forma admirable, escuchando los aplausos del público.
El primer "goal". El marcador funciona por primera vez al rematar Colls de un tiro imparable un pase de "marca" Cros.
Un córner y el empate. Loyola despeja de cabeza un córner, que tiro Espino, interviene Altés dos veces, hay una incursión de los forasteros por los terrenos populares y tras de esto, Silva, remata de cabeza un pase de Adolfo quien recibió el centro de Rodríguez, obteniendo el "goal" del empate.
En el campo suena una estruendosa ovación.
Antes de todo esto Altés cae en tierra después de detener de un plongeón un tiro apretado de la delantera popular.
Tres córners más. Pellicer tira un córner contra el Marino, que despeja Espino, el referee anula por off-side una arrancada de los azules. Iranzo corre airosamente la línea, cede el balón a Colls y a un falso despeje de Martín el esférico va a córner. Se tira luego otro córner más contra los marinistas, que Mauri sirve mal y a un "faut", que saca Gamis, Cros se luce en otro remate de cabeza.
El "referee" señala a los catalanes un "off-side" y una indecisión de los forasteros frente al marco adversario es la causa de que no se deshaga el empate.
Final de primer tiempo. Después de dos intervenciones de Altés acertadas y poco peligrosas, la defensa europeísta se luce en unos despejes. Espino interviene con oportunidad malogrando un avance de sus contrarios y con la pelota en los medios finalizan los cuarenta y cinco primeros minutos de juego.
El segundo tiempo. Saca Cros y apenas comenzado el señor Ojeda amonesta a Toledo por cometer una incorrección. Pellicer saca un córner contra el Marino. Alcoriza detiene un avance de las huestes populares; una cabeza peligrosísima de Cros e intervención de Alfonso. Un pase rastreado de Rodríguez que remata Silva a "goal" y que Altés detiene y Alfonso "El Bizco", se ve precisado a abandonar la puerta para detener un tiro de Ramonzuelo.
El segundo "goal" del Europa y el segundo empate. Al castigarse la puerta marinista con un córner es Pellicer el encargado de tirarlo y Colls el de perforar la red de los populares y a una arrancada de la línea delantera de los azules, Toledo consigue el empate, segundos después, de forma inesperada y muy vistosa, que se aplaude.
Un córner y tercer goal. Después de unos minutos de juego alto e insulso, desarrollado en el centro del campo, Pellicer sirve un balón y al rematarlo Colls, el meta lo envía a córner. Tirada la falta, sin pena ni gloria, se aplaude luego un remate de Colls, lindo broche a una combinación Cros-Pellicer. Un "faut" contra el Europa que tira Espino y que Toledo remata mal de cabeza y los catalanes se apuntan el tercer "goal" al rematar Cros de una bolea magnífica, imparable, enorme, un centro de Pellicer.
Un penalty imaginario y el lío número uno. El tanto obtenido por los catalanes, para el público no regatee sus aplausos, enardece los ánimos de los populares y en briosa arrancada, que la gradería alienta con sus gritos, el quinteto delantero y la tripleta central llevan el balón frente a los terrenos de la defensa. El referee señala un "faut" en la línea del área fatal. El público (parte de él) protesta la falta conceptuándola como un penalty. El señor Ojeda, titubea, vacila, disputa con los jugadores de uno y otro bando, consulta con el linier señor Frías, luego con el señor Cabrera ¿Penalty?... ¿Faut?... ¿qué ha sido ello?... ¿qué ocurre?... ¿Dónde está la autoridad del árbitro?... Pitos, palmas, escándalo, agentes del orden público en la cancha, nuevas discusiones, el equipo forastero que cometiendo una incorrección, se retira en señal de protesta, que no se retira luego, que se expulsa a Cros, que el linier señor Frías arremete al meta catalán descargando sobre él el banderín, Altés que llora, la bronca que arrecia, el ¡gran lío!, en fin, en donde se ha quebrantado todo lo inquebrantable en materia deportiva; en donde el público ha presenciado un espectáculo bochornoso y en donde, dando un mentís a nuestra caballerosidad, en un partido amistoso y ante un equipo forastero, obtienen los campeones de Canarias el "goal" del empate, chutando a la puerta adversaria, desprovista de guardameta. ¡Muy bonito!
Después..., entre otras cosas, el manifiesto malestar del público sensato; doce jugadores del Marino en la cancha; un córner contra los de casa y pare usted de contar.
Impresión. Por la ingrata que pudiera ser para los apasionados vamos a limitarnos casi a reservárnosla.
El "once" popular actúa con entusiasmo demostrando a cada paso ansias de ganar. Su comportamiento en el campo salvo pequeñeces hijas de la excitación momentánea, fue correctísimo, noble y generoso salvo "aquellos" del penalty famoso. Su moral, elevadísima. El mejor de todos, Adolfo.
Los forasteros pusieron todo en su empeño en no dejarse vencer. Loyola, fue el centro medio insustituible. Cross el delantero centro inteligente. La defensa, segura.
Moralmente los subcampeones catalanes vencieron por puntos.
El "referee"... del árbitro más vale no ocuparse y con eso nos agradecerá el favor.
El público, encastillado en su idiosincrasia.