NUESTRAS FIGURAS DE AYER
RAFAEL ORAMAS NAVARRO
Rafael Oramas Navarro. Los "ases" que fueron. Un centro medio "especial".
Veamos su silueta y currículo.
Nombre: Rafael Oramas Navarro
Fecha de nacimiento: 13-04-1904
Localidad: Guanarteme
Ciudad: Las Palmas de Gran Canaria.
Comenzó a darle patadas al balón desde muy temprana edad, allá en los "tesos" arenosos de su barrio "Guanarteme" y en el de Santa Catalina, anexo.
Así es que, la estirpe futbolística de los Oramas, se inició con Rafael. Como ya se ha dicho en alguna otra ocasión, fue a finales de 1921 y principios de 1922, cuando volvió a resurgir el fútbol en nuestra ciudad, gracias a los "teams" Gran Canaria y Porteño. Poco después Paco Curbelo reorganizó al Marino, así como no tardó en llegar la incorporación del Victoria, aunque ésta lo fue más tarde.
Como consecuencia de ello y el auge de los partidos, se iniciaron en el juego Alfredo Rivas, Rafael González, defendiendo los colores del "team" Gran Canaria. Asimismo, tenemos que decir que se fundó un nuevo club que llevó por título el nombre del barrio donde radicaba: "Santa Catalina", siendo la mayoría de sus componentes jóvenes jugadores que empezaban a iniciarse en estas lides deportivas, destacándose Manuel Espino "Jardinero"; Juan "El Moreno", Pepe Álamo y Rafael Oramas, éste último iniciador de la "saga" en los menesteres del "balón redondo".
Sus elevados dotes de dominio del "cuero" no pasaron desapercibido entre los "históricos", por lo que fue "pescado" entrando a formar parte del potente "teams" Marino F. C.
Su otro hermano Pancho Oramas, fue un excelente extremo derecho que se inició en aquel famoso primitivo Unión Arenal, cuya delantera fue Silva, Prudencio, Reyes, Hilario y Lázaro, cinco ases del foot-ball canario. Hasta que más tarde y poco a poco todos ellos ingresaron en equipos de primera categoría.
En la tournée del Real Club Victoria por tierras peninsulares, en el mes de abril de 1925, la escuadra blanquinegra victorista se llevó el siguiente cuadro de jugadores:
Correa, Jorge, Arocha, Ferreras, Castellano, González, Miguelito, Martín, Jiménez, Armas. Álamo, Padrón, Ortiz y Ramoncito.
Además fueron: Rafael Oramas, Luis Cabrera y Manuel Espino "Jardinero", del Santa Catalina, y Brito, del Marítimo.
Un pequeño esbozo de aquella tournée y su... conque
En el escabroso escenario de Mestalla, Valencia, nuestro foot-ball, representado por un club de tan alto prestigio como el Real Club Victoria, sufrirá tal vez la prueba más dura de su excursión, cual es presentarse en un campo extraño y ante un público prototipo del apasionamiento.
Nuestros "equipiers", solos acostumbrados a jugar en "casa", encontrarán en su primer "match", en el campo valenciano, el primer tropiezo de su tournée. Faltos del calor de nuestras multitudes, sin compenetración con los refuerzos llevados (si es que tales se entiende esos jugadores), huérfanos del indiscutible delantero Álamo, único conductor del rápido ataque realista, es seguro que tantas deficiencias influirán grandemente sobre nuestros jugadores en su partido inicial.
¡Ojalá que triunfara hoy el Real Victoria! Sería para los canarios el convencimiento del relativo buen foot-ball que se practica en nuestra tierra.
Su primer envite. Fue una hazaña, una gran hazaña de nuestros bravos jugadores empatar con el Valencia F. C., en su famoso campo de Mestalla, donde han sucumbido los mejores equipos peninsulares y continentales.
Segunda partida... se perdió. No pudo jugar Álamo, así como el "goal-keeper" Correa, lesionado tampoco pudo defender el arco canario, no por ello Brito que le sustituyó fuese inferior, sino que lo teníamos que perder y lo perdimos. No por clase de juego, sino a fuerza violencias y faltas. Y claro...
Primer encuentro con el C. D. Castellón. El juego desarrollado por el conjunto victorista de pases cortos y a ras de suelo, desconcierta a los levantinos. Los pupilos canarios, Padrón, Álamo, Ortiz, Oramas... todos están jugando horrores. Triunfo final de los canarios por el tanteo de 3-1.
El segundo "match" con la misma escuadra, el premio fue más rotundo aún para los pupilos victoristas. Marcador concluyente: 4-0
Los encuentros en tierras catalanas, hubo de todo. El primero de ellos, tuvo como resultado: U. S. de Sans, 1; Real Club Victoria, 0. El segundo, el triunfo correspondió a los canarios por 1-2. Hubo un tercer encuentro, que no se debió jugar nunca y que perdimos.
Más tarde, otros encuentros por tierras aragonesas y madrileñas y otra vez en suelo catalán, pues había compromiso para celebrar un "match" con el Centro de Sport de Sabadell. Encuentro que terminó en derrota.
El último encuentro por tierras de la madre patria se jugó con el F. C. Iluro, de Mataró. Nuestros jugadores, cansados, rendidos por tantos partidos y desplazamientos - casi seguidos - no pudieron presentar su cuadro completo. En fin, hasta Oramas tuvo que jugar de delantero centro. Al final del tiempo reglamentario el marcador arrojó el resultado de empate a dos goles.
La impresión que en esta gira, por tierras peninsulares, causó los jugadores canarios fue magnífica, excelente.
Después de la gira, comenzó el éxodo de jugadores canarios, Rafael González, Rafael Oramas, José Padrón "El Sueco", Pepe Álamo, Manuel Espino "Jardinero", Hilario, etc...
Años más tarde, cuando acabó su "travesía" por tierras peninsulares, Rafael Oramas, aquél famoso futbolista canario que inició la primera tanda de exportación a la península, ha liquidado todas sus facultades y regresa a su tierra natal.
La personalidad de Rafael Oramas. Fue un jugador excelente, serio, tenaz, incansable. Gran técnico, que dominaba los secretos de su difícil misión. Muy hábil para sortear los peligros y muy práctico por su regularidad y por su rendimiento, ocupando cualquier puesto que se le designara. Uno de los mejores hombres que ha tenido el Español de Barcelona, y que procedía de otro glorioso club canario "incubador" al menos, de figuras gloriosas del fútbol español.
Rafael Oramas dijo: Mi historia no es muy larga. Una estúpida lesión en la rodilla quiso que el fútbol terminara prontamente para mí, cuándo se me presentaban los mejores tiempos para triunfar en todos los órdenes.
Pero, al hablar de su historia, no puede olvidar unas críticas que había publicado un diario catalán que decían:
"Fue el Español de Barcelona, allá por el año 1925, quién inició la exportación de jugadores canarios, presentando en su campo, sobre el terreno del Sarriá, a Rafael Oramas, a quien la opinión consagró como uno de los más destacados valores del fútbol español y que una estúpida lesión le hizo perder para siempre sus magníficas facultades".
Rafael Oramas guardaba en su retina los gratos recuerdos de aquella excursión que realizó por primera vez a la península militando en las filas del Real Club Victoria, y también evoca aquella otra por tierras de la República Argentina formando parte en las filas del Real Club Deportivo Español.
Decadencia y ocaso de un centro medio.
Un equipo sin centro medio es el fracaso, la derrota. Como en todas partes que se juega al fútbol, el puesto de centro medio es el más difícil de cubrir, porque para dicho puesto se requieren cualidades especiales: vista, colocación y agilidad, sin tener en cuenta su estatura y ser valiente. En la época a que nos estamos refiriendo, los seleccionadores siempre habían tropezado con este escollo: Los había muy buenos y de fama: Meana, Balauste, Solé, Gamborena... y porque no, RAFAEL ORAMAS, valiente, ágil, por alto era un coloso, buena colocación, incansable, etc.
¡Cuantas veces hemos tenido que acordarnos de una fecha, de una época, de un momento determinado de la vida de nuestro fútbol, para acabar lamentando la situación a que había llegado la persona creadora de ese recuerdo!... Es un declive fantástico e irremediable el que inicia al futbolista en su prematura vejez; una cuesta corta, pero tan pronunciada, que pocos pueden mantenerse en ella sin caer.
Al hablar así, hemos de ocuparnos de un futbolista que logró durante algún tiempo, a alcanzar el máximo de la popularidad; de un "equipier" que un día inició la exportación canaria de futbolistas hacia la madre patria y transportando sus bártulos se presentó en la ciudad Condal para enrolarse en las filas de las huestes, en aquél tiempo, del famoso Zamora, constituyéndose poco después en el más destacado valor del club que le había adquirido, nos estamos refiriendo a Rafael Oramas. Ese jugador se convirtió en el "palmito" de la afición catalana, vistiendo los colores blanquiazules del prestigioso Real Club Deportivo Español de Barcelona.
Pues bien; Rafael Oramas se encontró abandonado por el fútbol; él se retiró en una tarde de gloria para el fútbol catalán, en que vistiendo los colores de la selección de Barcelona frente a los representativos de Checoslovaquia, sufrió un derrame en una pierna que terminó liquidándole todas sus facultades, y a poco después el fútbol le dejó a un lado y le olvido por completo. Y esto no lo merecía Oramas, como no lo merecieron tampoco otros que dedicaron todas sus actividades y energías al "juego" del fútbol y que dieron al deporte español días de gloria.
Después de su marcha del Español, pasó por otros clubes como el Racing de Madrid (1929-1930) y el Recreativo de Huelva (1930-1931) Y, he aquí como terminó la vida deportiva de un gran "as", que desapareció calladamente. Al regresar a su terruño confesaba que, solo aspiraba a conseguir un turno en los trabajos de "carga blanca" (portuarios) para poder proveerse del imprescindible sustento de cada día, cosa que consiguió. ¡Es tan dura la existencia!...
Y seguía relatando, os podría contar muchas cosas de aquella época, algunas las conocéis igual que yo, y otras no tienen objeto el resucitarlas. ¡La mala suerte de siempre!...
Así, Rafael, considerado el "Meana", de los "equipiers" canarios del balompié, da por terminada una época y comienza la andadura de una saga-estirpe de futbolistas que lleva por apellido Oramas.
Rafael, se caso y se fue a vivir a Barcelona. El matrimonio tuvo ocho hijos: Mateo, Tomás, Bernardo, Andrés, Isabel, Felipe, José y Ángel. Falleció el día 21-04-1968 a la edad de 64 años. Descanse en paz. En la actualidad siguen residiendo en Cataluña algunos miembros de su progenie.
Y, ya se sabe todos los ORAMAS fueron...