Domingo, 10 de agosto de 1924
3 - 3. Hoy, y ante una concurrencia que se puede calcular muy aproximadamente en 9.000 personas, contendieron los equipos Sevilla y Victoria.
A las cinco y veinticinco hace el saque el equipo forastero a las órdenes de Pascual que es el encargado de arbitrar el partido.
En los primeros momentos se dan jugadas emocionantes por ambos equipos, que entusiasman a los espectadores que les aplauden.
El primer goal lo consigue el Victoria a los siete minutos de un precioso shoot de Álamo, cruzado y muy bien dirigido, que le es imposible parar al guardameta forastero.
El Sevilla trabaja con ímpetu y gran voluntad, y a los quince minutos consigue el empate de un fuerte shoot de su centro delantero, que no puede evitar Correa, pues el balón entró junto al larguero.
Quedan así empatados por tener cada equipo un tanto; se siguen desarrollando jugadas preciosas por ambos bandos que con muy aplaudidas por la enorme concurrencia; pero pocos minutos antes de terminar este tiempo, el equipo visitante hace su segundo goal de un fuerte shoot lanzado por su punta derecha, que es imparable para el guardameta local. Después de algunas otras jugadas, se termina el primer tiempo.
Da comienzo el segundo periodo, pues el triunfo no se puede predecir quien ha de lograrlo. Aproximadamente a los veinte minutos empatan otra vez. Este empate obedece a un penalty que cometen los sevillanos; el encargado de tirarlo es Rivas, centro medio del Gran Canaria, que se alineó hoy junto con su compañero Juan de Dios en el team Victoria, haciendo introducir el balón en una forma maestra.
A los pocos momentos es perforada de nuevo la red forastera de un cabezazo artístico de Álamo al recibir un balón de córner; el Sevilla se encuentra entregado y sin voluntad de lucha, y hay momentos de verdaderos apuros para el guardameta referido.
Casi al finalizar el partido, vuelve a empatar el Sevilla por un tremendo cabezazo muy bien dirigido de su centro delantero. Hubo tres jugadas más, sonando luego el pito del referee que daba por terminado el partido empatado por haber hecho cada equipo tres tantos.
Del equipo sevillano los más que se distinguieron fueron el defensa izquierdo; el centro medio, el centro delantero y el punta derecha sobre de los veintidós jugadores.
Del equipo local se distinguieron Álamo, Correa, la pareja de defensas, Juan de Dios y Rivas, en mi opinión el mejor centro medio de Canarias.
El encuentro visto desde otro ángulo. Impresiones Los forasteros, sin hacer un juego exhibicionista que caracteriza al campeón andaluz, ese juego de sutil belleza, y de gran habilidad, que tan brillantemente nos demostraron en el primer encuentro, no por eso dejaron de confirmar su alta clase, especialmente los internacionales Spencer y Herminio y sus compañeros Rodríguez, Brand, Kinké y León que son los jugadores más salientes del Sevilla. Poseen las cualidades de rapidez, dominio de balón, juego raso, pase corto entre la tripleta central, y adelantado a las alas, todo lo ejecutan con gran inteligencia y desmarcamiento, siendo el cuadro un conjunto notable.
Así el primer partido fue correcto y noble dentro de las normas caballerescas del juego, no fue esto el encuentro de hoy, donde imperó el juego violento dándose un acto antideportivo verdaderamente censurable... Es lástima que lo que debería de ser un partido amistoso, de corrección y de nobleza, se traduzca en un pugilato de campeonato, para con unos señores forasteros, que no les vamos a disputar ninguna supremacía del foot-ball.
Culpable de este lamentable espectáculo es solamente el árbitro, que tan deficientemente dirigió el match, por no haber expulsado desde la primera vez los jugadores del pugilato, única manera que no se hubiera repetido tan lamentable incidente por su única falta de autoridad.
El equipo local, se presentó reforzado con los equipiers del Gran Canaria, Rivas y Juan de Dios. Su juego desarrollado no respondió a las grandes actuaciones del Real Victoria y esto influyó de un modo decisivo para no lograr el triunfo, pues no era una sorpresa el que nuestro equipo pudiera salir victorioso, pues su juego efectivo de gran rapidez, sobrio y abierto por pases largos a las alas, en oposición al exhibicionista de los forasteros; el juego constructivo y práctico del equipo local, tiene por finalidad única la consecución del tanto, que luchaba con aquél otro juego que entusiasma al público, trazando diagramas sobre el terreno... y con poca efectividad.
Como se marcaron los goals. El partido finalizó con el empate a tres tantos, resultado interesantísimo el encuentro por el score tan grande de goals.
El primero en inaugurar el marcador fue Armas, a los siete minutos de juego. Ortiz, recibe el balón de un saque de "out" y pasa a Armas, éste sortea a un back y de un fuerte shoot introduce el balón en la red.
A los quince minutos Brand, que está jugando colosalmente dentro del área de castigo entrega el balón a León, que estaba desmarcado, y éste jugador muy rápido tira a goal, marcando el primer tanto para su equipo.
A los treinta minutos de juego, Rodríguez después de driblar a varios adversarios, shoota sesgado y el cuero da en un poste y se envía a la red. Con el resultado de dos tantos a uno termina la primera parte a favor de los sevillanos.
El segundo tiempo transcurrían veinte minutos, en un ataque del equipo local, Herminio despeja el balón de espalda para su campo, y en el momento de salir el balón del pie le toca el brazo. Parte del público pide penalty, también los jugadores y el señor Pascual castiga al Sevilla con un caprichoso penalty, que según nos dicen al terminar el partido, manifestó a los jugadores forasteros que había cometido una equivocación. Rivas tira el castigo y coloca de un buen shoot el balón en la red.
A los pocos momentos el equipo local lleno de tesón y energías toma la iniciativa del juego, y desempatan por un remate de cabeza al rematar un córner Álamo. El Victoria, tal vez confiado en el triunfo tiene momentos de poca voluntad, lo que basta para que el Sevilla reaccione y faltando un minuto, logra Kinké el empate al rematar un gran centro de Spencer.
Alineaciones:
Sevilla: Avilés; Herminio, Sedeño; Escobal, Reyes, Iglesias; Brand, León, Kinké, Rodríguez y Spencer.
Victoria: Pepe Correa; Jorge, Ferrera; Juan de Dios, Rivas, González; Jiménez, Armas, Álamo, Padrón "El Sueco" y Ortiz.
El referee, señor Pascual, muy deficiente y desacertado en todo el partido.