Reseña de una época - 1943 -

HISTORIA DEL FÚTBOL CANARIO

- Retrospectiva --

Domingo, 11 de abril de 1943

Liga Interregional (1943)

STADIUM "PEPE GONÇALVEZ"

ATLÉTICO CLUB // C. D. IBERIA

El Atlético es derrotado por el Iberia

En diez minutos de juego logró el Campeón de Tenerife el triunfo

1 - 4. Creemos firmemente y para ello expondremos las infinitas causas que concurrieron para justificar tal afirmación, que en nuestra conciencia no se detuvo por un momento, que después de ver transcurrir la primera parte - cuyo resultado fue la igualada a un tanto -, el Atlético sucumbiera ante los forasteros por el tanteo arriba señalado.

Veamos esas razones o circunstancias. Se jugó la primera fase del encuentro con un dominio alterno por ambos bandos. Si una delantera atacaba con peligro para la portería, contestaba la contraria en iguales circunstancias. Si una línea de medios actuaba en el corte de juego de los atacantes, la similar realizaba idéntica labor; pero una sola excepción tenemos que señalar y es que la zaga iberista estuvo a una altura muy superior a la atlética, salvando con su enérgica y afortunada intervención, todo peligro para su marco.

Y así observamos que los dos bandos mantuvieron la atención de todo los concurrentes por el gran tren de juego que impuso las circunstancias: la concesión de los dos puntos codiciados. El Iberia, por demostrar que ha corrido con la suerte a sus espaldas en esta competición y su deseo de alejarse del fatídico lugar en que se encontraba en la clasificación. El Atlético, a igual que su contrincante en la esperanza de mejorar su puntuación, y ante este dilema la lucha se presentía llena de nerviosismo y algo dura, propia precisamente de esa circunstancia.

Un empate en la primera fase. Y a los veinticinco minutos de juego, es Asensio el encargado de romper el silencio del marcador. Se juega a gran tren; se crean jugadas peligrosas ante los marcos; los cancerberos se emplean con toda codicia, pero esto no evita que el atlético Carlos, consiga el empate. Y así continúa esta lucha con un trabajo ímprobo de las líneas medulares ante la ineficacia de las delanteras que no aciertan a empujar el balón hacia la red. Por falta de codicia de los tríos atacantes, se logra mantener este empate a uno en los primeros cuarenta y cinco minutos de juego.

Tres tantos en diez minutos. Nosotros casi llagamos a asegurar que el final de esta lucha de tal capital importancia para ambos, se iba a producir con el empate que señalaba el marcador. Pero, el fútbol es una añoranza similar al matrimonio: "que no se prevén los acontecimientos hasta haberse consumado los hechos" y esto precisamente fue lo ocurrido en unos escasos diez minutos. Se afianzaba más y más la defensa ibérica ante el acoso del trío atacante rojiblanco que no acertaba ante la meta muy bien defendida por el cancerbero Rafa - que, de paso, digamos es un gran guardameta -. Un disparo como consecuencia de una falta cometida por un albirrojo en la línea de penal, se introdujo bajos los brazos de Hernández. Dos minutos más tarde, Chicote en una jugada iniciada por sus compañeros de línea, consigue el tercero y Zuppo, de un buen disparo, hace el número cuatro. Y aquí se acabó todo. Es decir, no se acabó la moral ni el juego arrollador de los probables vencidos; por el contrario, el Atlético aumenta su presión; ataca con ímpetu la portería iberista, tira a gol; pero, ¡de qué forma! Varias ocasiones se le presentaron para aminorar la ventaja, y otras tantas malograron por la ineficacia de su trío atacante y así, el Iberia, con buena moral y buen entusiasmo, no se emplea a la defensiva, cosa muy natural en estos casos, sino más bien se lanza a la ofensiva poniendo en aprieto a Hernández que no se halla muy seguro bajo los palos. La defensa ibérica se mantiene bien y tiene que emplearse a fondo, pues el dominio de los atléticos es intenso.

No obstante este esfuerzo, inútil a última hora, el Iberia se adjudica la victoria.

Los hombres sobre el triangulo. El Iberia - nos ratificamos nuevamente en nuestra opinión dada hace unos días -, pasa por una crisis muy aguda. Posee una buena pareja de defensa, que actúa segura y enérgica, salvando - como hoy - peligrosas ocasiones. Rafa sigue siendo para nosotros un buen guardameta y los extremos, muy rápidos, pero la línea medular y sus interiores, acusan baja forma. No es el Iberia que hemos visto en otras felices ocasiones.

El Atlético tuvo un error muy marcado al ocupar Castilla la directriz de la delantera. Castilla es un buen defensa, pero no un centro delantero, y cada cual en su sitio. En la delantera, solo García continúa siendo la pesadilla de los guardametas. Trabaja y tira muy bien; y del resto, solo mencionaremos al medio ala izquierda, que cortó mucho, pero jugó muy adelantado, perjudicándose por su juego pausado.

¿Fue justo el resultado? Nuestro criterio, alejado de pasiones, es el que en buena lid el Iberia mereció el triunfo por su codicia y por su eficacia en las jugadas en la zona peligrosa, especialmente en la segunda parte, pero el tanteo lo consideramos un poco excesivo. Dos uno, hubiese sido mejor el reflejo del encuentro.

Los equipos se alinearon así:

Atlético Club: Hernández, Dévora, Moreno; Caballero, Abreu, Cabrera; Tony, Carlos, Castilla, García y Álamo.

Iberia: Rafa; Eusebio, Concepción; Diego, Cabrera, Chano; Teodoro, Supo, Chicote, Núñez y Asensio.

El arbitraje a cargo del colegiado, don Juan García, que hoy reapareció de nuevo con el silbato, fue en todo memento justo e imparcial. Así juzgamos nosotros.