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Reseña de una época - 1943 -

HISTORIA DEL FÚTBOL CANARIO

- Retrospectiva -

Sábado, 17 de abril de 1943

Liga Interregional (1943)

STADIUM "PEPE GONÇALVEZ"

 

UNIÓN MARINA  //  MARINO F. C.

 

El Marino, en una actuación pobre, bate al Unión Marina

Los unionistas presentaron un portero que no había jugado en primera categoría

 

GUARDIA, Unión Marina2 - 3. Antes de iniciar la reseña de los irreseñables, hemos creído oportuno dar a conocer unas palabras del meta del Unión Marina, Tino, que no intervino en el encuentro que nos ocupa.

Cuando los unionistas saltaron al campo y notamos la ausencia de Tino, preguntamos quien era el que le sustituía, manifestándonos que Valentín, un portero que tenía en reserva y que no había debutado en primera categoría. Ante este caso tan raro, en un encuentro con el equipo más fuerte que interviene en la Liga, hemos buscado a Tino, que se hallaba en el estadio y nos ha dicho: No se las causas existentes para que no fuera yo alineado. En un principio lo fui, pero luego alinearon a Valentín.

Estas son las palabras del excelente guardameta del equipo que aún no conoce en esta Liga el sabor del triunfo. Y francamente, se trata del mejor de cuantos jugadores tiene el Unión Marina. Este hecho tan significativo y la manifiesta mala gana con que se comportaron varios de los jugadores unionistas, han dado pie para que el público haga muchos comentarios. Nosotros creemos prudente no comentarlo.

El encuentro. El encuentro fue francamente pobre. La actuación de ambos conjuntos fue pésima. Decir lo contrario sería pecar de cualquier cosa menos de imparcialidad. Los unionistas saltaron al campo muy sonriente, y cuando llegaba el balón a los pies de los campeones, éstos se reían. Realmente no comprendimos el optimismo, pero lo suponíamos.

El encuentro solo tuvo una nota destacada. En los momentos finales del mismo. La media marinista se desfondó ante un Unión que tenía tres goles en contra y dos a favor, y que si no empató solo es debido a la mala suerte. Que se recuerde aquellos fallos de Ramos, y aquel bombardeo a la meta de Cristóbal, cuando este estaba batido y la pelota a dos metros de su portería durante algún tiempo, sin que los tiros bien dirigidos de los contrarios encontraran el camino expedito. Fue el cuerpo de más de un jugador el que salvó la situación.

Tal como jugó el Marino, con Tino en la puerta, pierde el partido. Pero no quiere decir que el Marino no juegue más de lo demostrado en este encuentro. Puede ser que se tuviera en cuenta al adversario y las cosas bastantes raras que hemos anotado. Podemos afirmar rotundamente que el Marino obtuvo los puntos por los pelos.

El dominio fue del Marino en casi todo el partido. Pero un dominio de poca o ninguna clase. En el primer tiempo, la línea media fue la mejor. En la delantera sigue destacándose Polo, que tiene un disparo formidable, pero que como jugador se eclipsa. Muy torpe con el balón en los pies y muy lento en el remate y en el pase. La zaga estuvo bastante bien, salvo aquellos minutos últimos de fallos constantes que casi le cuestan caro a los azules.

Pero hablemos de los vencidos. Si empezamos por el meta, es para señalar que fue el mayor o único autor de la derrota. Los dos últimos goles fueron francamente estúpidos. Sin seguridad en el blocaje y con una colocación imperfecta, la suerte fue su aliada, pues si los innumerables disparos que le fueron dirigidos van derecho a sus redes, la derrota hubiera sido estrepitosa. La defensa daba la sensación de temor a romper el cuero. De la media y la línea de ataque mejor es no hablar de ellas. Se vieron tantas cosas raras...

Los goles. El partido fue monótono en todo momento. Solo el primer gol fue bastante espectacular, ocurrido a los veinte minutos, por un tiro junto al poste, disparado por Campos al recoger un pase de Bartolo.

A los veinticuatro minutos del mismo periodo, Polo cede a Jerez y solo ante el meta dispara; el portero hinca las rodillas y pone las manos entre ellas, pero... ¡que cosas se ven! el balón pasa en medio de sus rodillas, de sus manos y su voluntad. Y a los veintiséis minutos, Polo hace el tercero, de cabeza.

En el segundo tiempo marcaron los unionistas. El primero de penalty, a los veintidós minutos, ejecutado por Acosta. Y a los treinta y tres obtiene el segundo Vega.

Del resto del encuentro solo las peligrosas reacción unionistas que no eran aprovechadas.

Arbitró Ferrera Ferraz, bien.

Unión Marina: Valentín; Semín, Guatiza; Lary, Acosta, Joseito; Campos, "La Lisa", Graciano, Gregorio y Álamo.

Marino: Cristóbal; Ramos, Pérez; Farías, Campos, Bartolo; Sanabria, Polo, Memé, Chucho y Minguine.